Sistemas de Organización y Gestión para Empresas
En la actualidad y previsiblemente en la próxima década se hará cada vez más necesario disponer de herramientas y/o sistemas integrales de control y gestión enfocados a la Mejora Continua, Kaizen, Lean y Six Sigma, o bien, de sistemas ágiles de desarrollo de proyectos con dos orientaciones distintas según sea la necesidad, bien métodos técnicos y ágiles como Scrum o gestión experta como Kanban. Los primeros aúnan aspectos comunes incorporando a su vez características propias que normalmente quedan englobadas en Lean y Six Sigma, si se implantan a nivel de toda la empresa, enfocados normalmente aun cierto cambio cultural a todos los niveles. El segundo grupo se refiere a metodología Agile, muy conocida últimamente en el mundo del desarrollo informático pero aplicable al desarrollo de nuevos productos y procesos industriales y su salida al mercado, de hecho ése fue su origen.
Los sistemas citados no son únicos, existen una serie de sistemas, algunos sencillamente son adaptaciones de los conceptos básicos de los anteriores aplicados a un determinado sector. La introducción de estas metodologías o sistemas en las empresas, implica necesariamente cambios a todos los niveles, cambios que deben estar inicialmente perfectamente asumidos por la dirección, y que normalmente crean posteriormente un “estilo de dirección”. Aunque el primer grupo, que denominaremos Kaizen requiere necesariamente de más tiempo para su implantación, hay que tener presente que hoy en día, si se decide abordar un cambio cultural, es necesario realizarlo rápido. La forma de realizar un cambio cultural de forma rápida se basa en varias claves, de entre las que hay dos que son las principales, una intensa y abierta información y el establecimiento directo de algunos cambios en los procesos. En la población de una empresa nunca se obtiene una evolución homogénea de las personas en el proceso de cambio cultural, y casi siempre se dan sorpresas gratas descubriéndose predisposición y habilidades innatas en personas que no las habían desarrollado anteriormente. Sólo hay dos aspectos con los que no se admiten grandes permisividades, el objetivo y el comportamiento.
Las ventajas competitivas que se pueden lograr en un determinado periodo, no perduran en el largo plazo, ya que la competencia también evoluciona. Las empresas necesitan tomar decisiones sobre su organización y además aplicarlas, pasar de sistemas organizativos tradicionales a sistemas Lean o sistemas eficientes y ágiles con mínimo almacenamiento, no es una tarea sencilla. En este caso lo ideal es acompañar esas deciciones y la voluntad, con un colaborador externo como es ATEC+ID.
En Kaizen, todos los procesos son medibles, se pueden mejorar y se pueden controlar, la primera premisa es mantener el esfuerzo de mejora en el tiempo y disponer de un permanente compromiso de toda la empresa, y especialmente de la Dirección. No se debe olvidar que lo primero es medir, y que además habrá que estar organizado tanto para ello como para que la empresa genere ideas, orden, sistemática de funcionamiento eficiente, sistemática de asignación y disponibilidad de recursos, capacidad de mejora, etc. Con Scrum o Agile, obtendrá personas comprometidas realizando un trabajo o desarrollando un proyecto o proceso con rigor.